Erick Luisenbarng

La familia de Erick es descendiente originalmente de Suiza, al ser nobles del lugar decidieron mudarse a Reino Unido para hacerse con mas riquezas por sus conexiones.
La vida del joven era bastante aburrida, para empezar no le permitian salir del castillo en donde vivian.. decian que su personalidad inmadura le traeria mala fama a la familia. Erick, poco a poco se fue convirtiendo en la oveja negra pues a nadie le interesaba.. incluso aveces sus padres negaban tener un hijo.
Un dia en el que nada fuera de lo normal ocurria a Erick le empezo a doler mucho la cabeza, seguido con un sangrado extraño de heridas que nunca se hizo.. aunque sus padres se dieron cuenta simplemente no le pusieron mas atencion, ellos eran completamente ignorantes con respecto a la religion y no se dieron cuenta de que eran estigmas.
Erick de alguna forma se encontraba mejor esa noche, se encotraba mirando por la ventana de su habitacion cuando de repente una risa contagiosa tuvo eco en el oscuro lugar.
-Que horrible lugar tenemos aqui.. -
El joven volteo rapidamente y alado de su cama se encontraba un hombre algo gordo parado con una sombrilla desplegada y recostada en su hombro.
-Buenas noches joven ingles.. cual es tu nombre ?-
-Erick-
Respondio sin si quiere parpadear o sentir temor a la rara presencia que aparecio de la nada, en este punto de su vida no le importaba morir y mucho menos mantener una charla con alguien vivo.
-Estas feliz con tu vida, Erick ?-
-NO!-
Exclamo enojado y sin haber pasado ni un segundo de que la pregunta habia sido formulada.
-Lo imagine.. te dire que no eres alguien normal, Erick.. estas destinado a grandes cosas y conmigo seguro las cumpliras.. acompañame.. -
El hombre se giro de perfil sin quitarle la vista a Erick y de unos pasos atras una gran puerta oscura se desplego.. monstruos voladores salieron de alli y se esparcieron por el castillo causando gritos de la servidumbre. Despues el desconocido sonriente empezo a caminar adentro.
Pasaron un par de segundos y sin importarle nada Erick corrio hacia la puerta que se cerro apenas entro.