Bosque Carmesí [Naomi y Crimson]

Komui escribió:

Lugar:Moldavia-Europa

Exorcistas: Crimson Rednight, y Naomi Livetti.

Información:Hemos tenido informaciones de que en el parque central de la ciudad, las plantas de noche sean actuado de forma rara y algunos días sean encontrado cadáveres de personas que parecen bolsas de carne sin vida.Los habitantes de la ciudad están aterrados, sin saber que hacer las autoridades no han echo nada al respeto, nuestros buscadores creen que es una obra de una inocencia.

Exorcistas su deber es de ir a investigar, y si es obra de una inocencia deberán traerla de nuevo a la Orden.

suerte y cuídense mucho.

Orden de Posteo:

Naomi Livetti-Silver_Zaphiro
Crimson Rednight-Archer
Fausto Goethe-Fautos 8vo

Era un día normal como cualquier otro, los rayos del sol traspasaban la orden por sus enormes ventanas, los científicos corrían de un lugar a otro con una montaña de papeles encima y los demás exorcistas corrían con sus armas antiakumas para ir a una nueva misión y los rastreadores se dirigían al comedor de Jerry para un almuerzo delicioso.

-Recuerdan la misión en África?- me encontraba sentada en una mesa rodeada por algunos rastreadores que me habían tocado ser compañeros de misión. Estábamos recordando antiguas misiones y sus momentos de mas alegría, tratando de olvidar cuando nos enfrentábamos a los akumas nivel 1 o nivel 2 -Aquella en la que Ben se espantó con una cría de jirafa?- yo tome el jugo de naranja en mi mano y dándole un sorbo afirme con la cabeza a aquella pregunta que me había hecho el rastreador. Los rastreadores empezaron a reír por aquella experiencia tan divertida y gracioso de una misión no tan reciente -O aquella misión en Oceanía cuando nos perdimos en las calles de la ciudad- todos los rastreadores siguieron platicando y yo los escuchaba con una sonrisa en mi rostro. Después de un momentos recordaron un momento en el que yo hice algo realmente gracioso los rastreadores empezaron reír todos al unisono Jajaja..perdone exorcista-sama pero fue realmente gracioso- yo esbocé una gran sonrisa para posteriormente dar paso a una risa realmente dulce.

No pasó mucho tiempo en que un científico llegará y me pidiera ir a la sala de misiones -Tenga cuidado exorcista-sama, la estaremos esperando- yo sonreí y después salí corriendo a la sala de misiones esperando a que me dieran el informe exacto de la misión. Llegué lo mas rápido posible y en el escritorio de Komui resaltaba una carpeta ordenada de todo el desastre de papeles que ya era costumbre para mi verlo siempre -Jeje…típico de Komui-san- dije al momento que tomaba en mis manos el informe y me dirigía a la salida de la orden.

Llegué a la estación del tren y al llegar mire alrededor de toda la multitud de la gente buscando a mi compañero pero a mi criterio no había llegado aún - Lo esperaré aquí mientras- solté un suspiro y me senté en una banca mientras tomaba el informe en mis manos y lo empezaba a leer detenidamente para así crear una estrategia o al menos saber que hacer al momento que nos encontráramos con el fenómeno causado por la inocencia o al menos eso era lo que creía la orden -Europa…sera divertido ir de nuevo para allá- dije olvidando que talvez algo muy inesperado nos estuviera esperando, siempre veía el lado bueno y trataba de sonreir ante las escenas mas terribles.

Una puerta del arca se abrió en un callejón cercano a la estación de un tren, de esta un hombre de cabellos rubios, un sombrero y una bata blanca y un maletín lleno de lo que parecían ser formulas emergió de forma un tanto cansada. Este hombre se rascaba la nuca mientras dejaba escapar un suspiro de cansancio, tenia curiosidad por saber lo que se sentía viajar en el ferrocarril lleno de gente.

A paso cansado camino a una estación mas o menos cercana a no mas de 40 metros del lugar donde había emergido la puerta hasta poder ver el ferrocarril que pensaba abordar – so-sorprendente!!! –dijo con un gran brillo en los ojos al momento en que lanzaba su maleta por los aires y se acercaba para poder palpar la maquina. Susurro un centenar de cosas sin sentido durante unos minutos mientras colocaba su oído en la maquina o intentaba abrirla o la golpeaba con diferentes tipos de fuerza, tanto así que logro armar algo de tumulto a su alrededor sin saberlo, por su parte las personas que lo rodeaban susurraban lentamente mientras lo miraban extrañados y algunos hasta se reían por la forma de actuar del extravagante medico

Seguía leyendo el informe lentamente mientras tomaba con fuerza el mango de mi estuche de violín. Mientras lo leía soltaba uno que otro suspiro y cerraba mis ojos moviendo la cabeza -Bolsas de carne sin vida…- fue lo que paso por mis pensamientos en ese instante de repente sentí como alguien se paraba enfrente de mi y preguntaba si yo era Naomi Livetti.

Alze mi mirada lentamente y observe que era un joven de cabellera blanca-plateada peinado en puntas hacia atrás y los que mas me llamó la atención fue que uno de sus ojos tenía un color rojizo mas no le iba a dar tanta importancia, éramos compañeros y debía comportarme lo mas linda con el. Deje el informe a un lado y tomando mi estuche de violín me levante de la banca sonriéndole a mi compañero -Si así es, mucho gusto. Usted debe ser Crimson- lo observe de arriba abajo y finalmente afirme con mi cabeza que si tenía las características de ser miembro de la orden negra.

Al pasar 5 min. solté un suspiro y miré al reloj de la estación esperando a que se acercara rápidamente la hora de abordar el tren que se encontraba reposando en las vías. Miraba mi estuche de violín, recorría su cerradura con mis dedos, los abría para ver mi arma antiakuma, lo cerraba de nuevo, me quitaba los mechones de pelo que estaban en mi rostro..hacía cualquier cosa para hacer pasar el tiempo pero parecía que era imposible -Que estará pensando Crimson-san..- era lo que pensaba mientras lo miraba y veía su ojo azul y su ojo rojo.

Finalmente opte por dar una vuelta en la estación de tren así que deje mis cosas en la banca donde estaba sentada y mostrando una sonrisa le avise a mi compañero sobre mi pequeño paseo para hacer pasar los 25 min. que faltaban para abordar el tren. Empecé a caminar a paso lento, observando todo lo que estaba a mi alrededor, había mapas de ubicaciones, gente recogiendo maletas de otras personas y sin olvidar la enorme multitud de gente -Siempre las estaciones son iguales? Nunca pasan cosas intere…- no pude terminar mi frase porque enfrente de mi había caído del aire una maleta un tanto extraña a mi parecer. Yo me puse de rodillas recogiendo todo lo que se había caido de esta, al finalizar de recogerla la tome con mi otra mano ya que la otra estaba ocupada por mi estuche de violín y empecé a preguntar a la gente sobre su dueño o dueña.

Seguía preguntando y nadie me daba una respuesta afirmativa o una con la cual pudiera saber de quien era. Pasaron 10 min. y ya se acercaba la hora de abordar, yo a la vez me encontraba feliz pero a la vez no ya que si no encontraba el dueño de esta maleta no podría estar tranquila y estuviera pensando toda la misión acerca de ese asunto pero, algo me hizo llamar la atención, era una multitud de gente reunida en un mismo sitio, como si rodearan algo o a alguien -Que estará pasando..sera divertido?- fue mi ultimo pensamiento antes de dirigirme al lugar.

Al llegar observé que un señor tenía su oído reposando en el tren y lo golpeaba en diferentes maneras, yo no evite sonreir cuando sentí que algo me jalo de mi traje de exorcista -Esa maleta es de ese señor..- yo le agradecí asintiendo con la cabeza y tomando con fuerza la maleta me acerqué a el -Disculpe señor al parecer se le cayó esto y..si quiere abordar el tren debe hacerlo en…5 min!- las ultimas palabras las exclamé un tanto alto y sonriéndole al señor me despedí con mi mano mientras corría hasta el lugar donde se encontraba mi compañero.

Llegué rápidamente y dando una gran respiro tomé mi maleta de cosas y tomando la mano de mi compañero nos adentramos en el tren. Al entrar al tren me senté en uno de los asiento y le sonreí a mi compañero, gracias a mis otras misiones no me importaba llamar demasiado la atención o ser demasiado social, ya era mi naturaleza.

Estaba en medio de su experimentación cuando una jovencita se le acerco y le entrego la maleta en la cual portaba sus experimentos químicos que tan olvidadisamente dejaba atrás en ocasiones. Esta era una de esas ocasiones, ya que posiblemente se habría ido sin este maletín y luego se habría lamentado y se hubiera autodenominad como un completo imbecil.

No tubo tiempo de agradecer a la chica, puesto que esta ya se había ido, pero recordaba mas o menos la formación de su cara. En su mente se pregunto que había pasado que se habia retirado tan prontamente y quedando plasmado en esa idea fue afortunadamente interrumpido por la voz de uno de los que se encontraba dentro del ferrocarril gritando que ya casi era la hora de partir.

Dejo de pensar demasiado y abordo al tren con el destino que le parecía decía en su boleto, era su primera ves en tren y deseaba disfrutarla, pero su compañía solo se encontraría al otro lado del recorrido y no antes

(off: gomene por el post tan corto, falta de inspiración ^^’)

Entré al vagón del tren y dando un gran suspiro me deje caer en el asiento que daba hacia la ventana porque ya era costumbre para mi ver el paisaje mientras iniciábamos el recorrido. Estaba a punto de sacar mi violín para limpiarlo y recorrer sus cuerdas con mis dedos pero de repente escuche la voz de Crimson-san y alzando mi cabeza para mirarlo le mostré una sonrisa respondiéndole a lo que me había preguntado –Para ser sincera fue realmente divertido a pesar de ser por un momento realmente corto- recordé el rostro del señor al cual le había entregado el maletín y al recordarlo no pude evitar poner una gran sonrisa para dar paso a un leve risa.

El tren empezó a moverse pero al hacerlo lo hizo de una manera un tanto brusca, ya que habia hecho que mi estuche se cayera de mis manos y yo me caí de mi asiento. Al caer en mi rostro se vio una pequeña expresión de quejido pero no le di importancia a mi dolor si no que me preocupaba mas mi estuche, mi violín, mi inocencia, mi vida -Note dio…donde estas, donde estas?- era lo unico que susurraba mientras buscaba por el suelo el estuche de mi violín.

Despues de un momento el tren hizo de nuevo un momento brusco y me hizo caer de nuevo pero al caerme pude ver de reojo el mango de mi estuche asi que rapidamente me levanté y agachandome recogi mi estuche aunque para hacerlo tuve que tirar una maleta de un pasajero -Tenga mas cuidado!!- exclamó el dueño de la maleta y yo solamente le pedía perdón. Finalmente me volví a sentar en mi asiento respectivo y mirando mi estuche le empecé a explicar a Crimson por mi desesperación de encontrar a mi violín -Lamento si lo preocupe o le hice pasar vergüenza pero..Note Dio es mi amigo de la vida. Hemos estado juntos desde que inicie mi camino en la orden y hemos realizado todas las misiones juntos..- tomé con fuerza el mango de mi estuche de mi violín y con la otra mano me limpie una lagrima que había salido por recordar todos los momentos pasados, desde que me lo compraron hasta cuando me convertí en tipo cristal -Note Dio y yo…estamos unidos por algo que no puedo explicar. De seguro piensa que es algo tonto no Crimson-san- miré a Crimson y cerrando mis ojos le mostré una sonrisa.

Había abordado el tren sin pensar demasiado en el recorrido y eso era bueno, ya que este estaba lleno de saltos y desvíos, lo que hacia difícil caminar. Se encontraba relativamente perdido ya que no encontraba su asiento correspondiente y por el cual había pagado. Se había sostenido de una pared siguiendo a uno de los pasajeros cuando un golpe del vagón provoco que un estuche y posteriormente una joven se aparecieran frente a el y golpearan al hombre que se encontraba frente a el y se armara un pequeño pleito de palabras por lo acontecido.

Dejo escapar un leve suspiro con una ligera sonrisa y respirando profundamente se dispuso a entrar al vagón para agradecerle a la joven la anterior ayuda con su maleta, o eso pensaba únicamente hasta acercarse a radio visual de esta y notar al jovenzuelo que estaba frente a ella y ver su raro aspecto, su interesante dispar de color de ojos y su inesperado guante que por alguna razón despertaban su curiosidad. Escucho parte de la explicación del joven, de lo cual ese extraño color de ojos parecía tratarse de una enfermedad y acercándose instintivamente al rostro del joven no mas de unos centímetros de distancia y con una mano en la barbilla como en posición pensante examino un poco la cara del joven

-ciertamente se trata de un caso extraño de deformación del ADN… - dijo a viva voz mientas que con la otra mano tomaba la cara del joven y lo movía en diversos ángulos – es realmente fascinante quizá si cambiáramos un poco la configuración del ADN… necesito un poco de análisis – se alejo un poco del joven para poder verlo completamente, se acerco de manera incomoda a este y le comenzó a palpar el cuello y el pecho sin importarle la opinión de este y luego abrió su maleta por un segundo para tomar una gran jeringa con una aguja entupidamente grande – esto le podría doler un poco pero recuerde que todo es en el nombre de la ciencia – dijo mientras una cara de desquiciado pervertido inundaba su rostro y sus labios pintados daban una sensación de desconfianza total

Empecé a escuchar las palabras de Crimson y al escucharlas me llenaba de una sensación de calidez, nunca antes había conocido a alguien con el mismo tipo de inocencia que yo y mucho menos que comprendiera lo que era estar unido a su inocencia pero después de un momento empezó a explicarme sobre su diferencia en color de sus ojos -No se preocupe por eso-.

Solté un suspiro y por alguna causa mire de reojo a lo que nos rodeaba, en eso pude ver como el señor al cual le entregue la maleta se encontraba ahí, me quedé algo sorprendida pero a la vez feliz ya que no sabía si había alcanzado a tomar el tren a tiempo -Oohh..Crimson-san el es el señor al cual..- no pude terminar mi frase porque el señor con cabello rubio y labios de un tono diferente se acerco demasiado cerca de mi compañero de misión al parecer estaba examinando o algo por el estilo, no sabía la causa exacta del porque lo hizo pero no pude evitar tapar mi boca para esconder mi risa.

El señor frente a nosotros empezó a decir algo respecto a la diferencia de color de los ojos de mi compañero y yo me quedé un tanto sorprendida -Sera doctor?- fue lo unico que pensé en el momento que empezó a girar la cabeza de mi compañero en diferente ángulos. Finalmente dijo algo acerca de un cambio de ADN, al escuchar esa palabra me mire mis manos y tenía las cicatrices de cuando mi inocencia tuvo que tomar mi sangre para convertir sus cuerdas verdes en cuerdas color carmesí. Me quedé algo pensativa, recordando cuando estuve inconciente por mucho tiempo y en las pruebas que me hacían los científicos y Komui para conocer mas acerca de mi inocencia.

Alzé mi mirada un poco y en eso miré como el señor buscaba algo en la maleta que le había entregado anteriormente pero mis ojos se sobresaltaron al ver la enorme aguja que había sacado -Es..es enorme!- exclamé sin importarme que todos los que estaban en el lugar se me quedaran viendo, con tan solo ver la aguja recordé a Komui y su Komuibot. Cuando empezó a acercarse a mi compañero levanté un poco la mano mostrando mis cicatrices con formación extraña y haciendo que la aguja se colocara en el espacio que hay entre los dedos le sonreí al señor con aspecto un tanto extraño -Creo que para tener pruebas necesitara un laboratorio o me equivoco?- realmente no me importaba ver ese rostro en el, ya había visto demasiadas cosas realmente fuera de lo común que ya no me impresionaba o me llenaba de miedo.

-Venga sientese, aun ahí un espacio libre aquí- tras decir esto gire mi mirada a mi compañero para que confiara en lo que estaba haciendo. Me estire un poco alzando mis manos hacia arriba y soltando un pequeño bostezo me rasque mi ojo derecho -Al parecer falta poco para llegar, estoy ansiosa por tocar con Note Dio- tomé mi estuche de violín y abriendolo un poco, para mi misma, empecé a recorrer las cuerdas carmesís de mi violín -Ahora que lo pienso no nos hemos presentado, me llamo Naomi Livetti mucho gusto- y cerré la cerradura de mi estuche.

Suspiro al notar que no le dejarían continuar su investigación por el momento, pese a que el realmente deseaba hacerlo. Dejo escapar un suspiro mientras se sentaba en el asiento disponible y al mismo tiempo guardaba la jeringa con la extravagante aguja. – bueno, bueno… mi nombre es Fausto Goethe y soy un científico loco… enserio…

Se estiro un poco en el asiento mientras que bostezaba de sobremanera para caer apoyando sus brazos en sus piernas en modo de cansancio. - Por cierto Naomi… esas marcas en tus manos son muy peligrosas según tengo conocimiento… me llama la atención la forma en que cicatrizaron… - pauso su habla por un momento mientras que miraba de reojo a ambos jóvenes y posteriormente los cerraba – pero mas que eso me gustaría saber por que visten esas ropas que resaltan tanto entre los demás (miren quien lo dice) – clavo su mirada en la joven anteriormente conocida para así esperar una respuesta, sin prestar una verdadera atención al camino

Solté un suspiro al ver como el señor guardaba su aguja realmente grande que empezaba a preguntarme como le cabía en la maleta. Al momento que se sentaba gire mi cabeza para ver el paisaje y mis labios dibujaban una sonrisa en mi rostro de repente escuché de nuevo la voz del señor presentandose ante nosotros y diciendo su nombre -Fausto Goethe..- miré por un momento al suelo y trataba de recordar si ese nombre lo había escuchado antes mas nada venía a mi mente pero unas palabras de Fausto me hicieron levantar mis ojos y mirarlos fijamente -Cientifico loco…- sonreí de manera nerviosa mientras una gotita recorría el costado de mi frente.

Vi como se estiraba y como bostezaba, mientras lo miraba me agachaba un poco para dejar mi estuche de violín del lado derecho de mi asiento buscando una forma para que no se cayera. Al momento que me levanté escuche que Fausto pronunciaba mi nombre y decía sobre mis cicatrices, yo me quedé un poco sorprendida ante sus palabras y subiendo mis manos las extendí para que pudiera verlas con mas claridad en ese momento el nos había preguntado otra cosa y sentía como una mirada se clavaba en mi -Se podría decir que un amigo necesitaba sangre y yo la sacrifique de mis manos- me quedé un poco pensativa acerca de la otra pregunta que nos hizo, no sabía si podría contarle sobre nuestros uniformes pero parecía un extranjero un tanto curioso cosa por lo cual tome aire y le empecé a contar -Este traje es algo especial, demuestra nuestra autoridad sobre los demas además que es para atraer a nuestros enemigos je je- alzé mi mano hasta mi mejilla y con un dedo me rasqué mi mejilla.

El tren empezó a descender su velocidad y eso daba señal a que nuestro destino se estaba acercando, yo me asomé rapidamente por la ventana para poder ver con mas claridad el lugar al cual ibamos a bajar. Finalmente el tren bajó su velocidad y se escuchaban ruidos de movimiento, ruidos de maletas, personas levantandose y cosas asi. Me estiré en mi asiento y tomando mis cosas personales, sin olvidar mi estuche de violín, las coloque en mis piernas, no era de mi gusto bajar cuando toda la multitud lo intentaba -Oh, Fausto-san desea que lo acompañemos a su destino o usted va solo- me levanté y acercandome a mi compañero coloque mi mano sobre su hombro y le sonreía a Fausto esperando su respuesta.

Escucho la semi-proposición de la joven con un interés bastante alto, puesto que asi -podría investigar mas a fondo lo que le interesaba de aquellos “exorcistas”. Realmente deseaba aceptar ir con ellos, pero al ver al joven de los ojos dispares no pudo evitar soltar una carcajada insonora al momento en que se ponía de pie y se acercaba al joven. Coloco su brazo alrededor de este para así finalmente acercar su rostro sonriente y llamativo al del pelo pincho de ojos dispares – tranquilo, no pretendo arruinar la velada de una pareja joven – dijo mientras reía de forma divertida, puesto que a sus ojos ellos se veían como una pareja – además… así no los molestare cuando necesiten un tiempo de calidad solos – le susurro con una cara de malicia un tanto pervertida al momento en que se colocaba tras el joven y le daba una palmada de aliento bastante fuerte – animo guerrero del amor, tienes todo mi apoyo!!! – grito a la ves que literalmente escapaba por uno de los vagones del tren y de un salto pisaba tierra cayendo mientras sostenía su sombrero en su cabeza y en la mano derecha sostenía su maleta

Bye-bye!!! – se despidió con la mano al otro lado de la ventana y pocos segundos después se puso a caminar con destino a la ciudad, sabia lo que debía hacer en este momento, puesto que un pequeño amigo con una marca del numero 2 lo estaba esperando en algún lugar de la ciudad

Sonreí mientras me alejaba un poco de ellos para así poder ir por mis pertenencias que se encontraban a una distancia no tan lejos pero si para separarme de ellos.
-Donde estas…donde estas…- pensaba para mi misma mientras miraba entre los asientos donde estabamos sentados ya que, por un movimiento realizado por el tren hizo que mi maleta se desplazara de su lugar pero realmente lo unico que tenía ahí era ropa de civil y el informe de mision, no me interesaba tanto encontrarla pero tenía que hacerlo.

Cuando la encontré finalmente la tome en mis brazos checando que estuviera todo lo que debería estar dentro de esta. Solté un suspiro de alivio al ver que todo estaba en orden y la volví a cerrar, al momento que la cerraba miré a Fausto y a Crimson, al parecer se estaban llevando mucho mejor porque mis ojos veían como Fausto rodeaba con un brazo el cuerpo de Crimson mientras reía nuestro nuevo conocido. Yo sonrei y empecé a caminar hacia ellos cuando de repente escuche el grito de Fausto [cyan=color]-Guerrero del amor?-[/color] me quedé pensativa acerca de lo que quizo decir Fausto pero todos mis pensamientos se fueron al ver como el escapaba por lo vagones y colocando su mano en su sombrero y con la otra su maleta. No pude evitar reir levemente mientras que me despedía de el -Tenga cuidado Fausto-san!- exclame colocando mis manos alrededor de mi boca para aumentar el volumen.

Al ver que ya no se podía visualizar su silueta di un suspiro y acercandome a Crimson le afirme con la cabeza acerca de lo que había propuesto anteriormente, se estaba haciendo tarde y lo mejor era encontrar una posada asi que acomodando mi maleta y mi estuche pude tomar la mano de Crimson y correr hacia las afueras de la estación. Al salir me quedé realmente asombrada, la ciudad era hermosa y la gente se veía muy amigable, todo parecía de alguna manera perfecto si olvidamos el hecho del peligro que afrontabamos -Hola Naomi-san- me quedé un poco callada y sorprendida, me di media vuelta y la persona la cual me había saludado era un viejo amigo mío, mi primer compañero en una misión y ese amigo era -Ben!- dije mientras soltaba mi maleta mas no mi estuche y lo abrazaba fuertemente como si nunca nos hubieramos visto.

El rastreador me correspondio y nos dio indicaciones de seguirlo, yo miré a mi compañero y sonriendole le hice una señal con mi mano para que nos siguiera y que no sintiera desconfianza. Caminamos por las amplias calles de Europa y yo me quedaba fascinada con cualquier cosa que veía, parecía una niña pequeña que era su primera vez viajando o un turista que no conoce nada. Ben empezó a platicarme acerca de sus misiones con otros exorcistas y yo le seguía la platica muy entusiasmada, en eso me detuve por un momento y acercandome a Crimson lo tome del brazo y lo acerque a Ben -Ben-kun el es mi compañero y amigo Crimson- Ben hizo una reverencia y al terminarla alzó la mano para estrecharla. Me quedé viendo la escena mientras que detrás de nosotros se encontraba una posada con una pinta muy calida y muy linda ademas -Crimson-san el es mi primer compañero y mi mejor amigo..Ben- cerré mis ojos y ladeando un poco la cabeza sonreí de manera dulce esperando a que uno hablara con el otro.

Se encontraba caminando tranquilamente por la ciudad, ciertamente había tenido una mala idea al haberse separado de los exorcistas, pero quien podría culparlo de haber acentuado el romance de la escena – UN HURRA POR EL AMOR!!! – grito levantando su diestra en el aire con el puño serrado dando una pequeña alusión de apoyo, cosa que hizo que un par de personas que estaban cerca de el en ese momento se vieran espantadas de cierta forma.

Una pequeña rigidez en la espalda hizo que sintiera deseos de sentarse un rato, no obstante solo se dejo llevar por eso una ves vista una pequeña banca de madera que había a un costado del camino y en la cual extrañamente y tal ves por la hora no había nadie sentado – realmente esta ciudad muere de noche... – pronuncio tranquilamente mientras el crepúsculo iluminaba con su anaranjada luz a las pocas personas que quedaban y de alguna forma bastante peculiar entraban desesperadamente a sus refugios u hogares según parecía ser

Ansiosamente se quedo esperando sentado en aquella silla a la hora del anochecer que era mas o menos en una hora, pero a todo la espera era algo que le molestaba demasiado y a la ves le provocaba mucho sueño. Los ojos le estaban pesando cuando un hombre de anteojos y cabello castaño revuelto se le apareció de frente con una mirada un poco silenciada – no debería quedarse dormido en estos lugares señor Fausto – la frase de este individuo hizo que el Noé dejara escapar una leve carcajada que le despertó completamente

Y tu no deberías tardarte tanto Akuma-chan – dijo mientras se colocaba de pie y comenzaba a caminar tranquilamente mientras le rodeaba con un brazo el cuello al akuma – por cierto quiero que te comportes como humano con cualquier persona incluso con los exorcistas ¿si? – dijo caminando tranquilamente mientras que el akuma escuchaba silencioso – y también quisiera que los 10 amiguitos que se encuentran escondidos en la estación de trenes distrajeran un poco a los exorcistas y así me dieran un poco mas de tiempo para investigar lo que esta ocurriendo – al momento de decir esto y quizá por telepatía un tumulto de 10 personas que se encontraban en la estación de trenes cercano a donde estaban los exorcistas tomo la forma de unos akuma de nivel 1 y sin nada que decir comenzaron a atacar a las personas que se encontraban en el anden. El objetivo? Ninguno mas que el de retrazar a los exorcizan un par de minutos

Veía como mi compañero de misión y mi antiguo amigo se presentaban y se saludaban el uno al otro, realmente me hacía muy feliz el pensar que se podrían llevar muy bien como lo hacía yo con mis demás compañeros. Al momento que Crimson soltaba la mano de Ben se dirigió a mi y me hizo una pregunta, pregunta que se trataba acerca de que era lo que ibamos a hacer, yo me quedé un poco pensativa y mirando detrás de mi solte un sonido de asombro -Creo que deberíamos entrar a esa posada- dije al momento que me acercaba la perilla de la puerta y girandola pude abrir la puerta a su totalidad.

Al abrirla se pudo observar el interior además que desprendía una sensación de demasiado calida y agradable -Donde estará la recepción…- empecé a observar todo lo que había dentro de la posada cuando pude ver en la esquina del final del pasillo una persona atendiendo a una pareja. Me acerque a la recepción y Ben estaba detrás de mi, era facil saberlo ya que podía escuchar sus pasos, al estar frente a la recepción el joven de al parecer 18 años de edad me mostró una sonrisa -Mucho gusto en que le puedo ayudar sañorita- me quedé viendolo fijamente para finalmente devolverle la sonrisa -Me podría dar..- no pude terminar mi frase ya que un ruido repentino y realmente fuerte hizo que girara rapidamente.

La gente que se encontraba en la sala de espera de la posada empezó a murmurar y algunas señoras gritaban de pánico, yo solamente mire a Ben a los ojos y este solto un suspiro haciendo una señal una señal de afirmación -Yo me encargo de sus habitaciones Naomi-san, ustedes vayan- fue lo que dijo mientras se acercaba a la recepción y trataba de calmar al joven de cabellos negro azulado. Sonreí pero de una manera un tanto triste al pensar que talvez no podía volver pero no tenia que pensar en eso solamente en la seguridad de las personas -Vamos Crimson!- exclame mientras me quitaba el vestido que tenía encima de mi uniforme de exorcista, al quitármelo se pudo observar un vestido mas arriba de las rodillas sin mangas y adornos plateados y sali rapidamente de la posada con mi estuche de violin.

Al salir pude ver como la gente corría despavorida de la estación de trenes cosa que me hizo saber que la causa de los sonidos provenía de la estación, cosa que se me hizo algo extraño ya que no hacia mucho tiempo que habiamos salido de ahí. Corrí rapidamente mientras que el estuche se golpeaba en mis piernas, al llegar a la puerta se encontraba un oficial de policía y me aceque a el -Que sucedió!?- el oficial solamente me miro espantado y trato de titubear algunas palabras pero finalmente el conocimiento, lo tomé en mis brazos y lo recoste en el suelo y en una zona segura lentamente para que así se recuperara mejor -Crimson, crees que pueden ser akumas?- le pregunte con un tono de voz serio mientras giraba mi cabeza y lo miraba fijamente a los ojos.

A paso ligero y veloz Fausto el Noah y el akuma encubierto llegaron al parque central apenas un tiempo antes de que el crepúsculo finalizara y diera paso al calido aunque tenebroso manto nocturno. Ciertamente la energía era mucho más tensa de lo que imaginaba, seguramente por que lo que ocurría en esa ciudad por las noches en el parque central estaba a no mas de unos minutos en ocurrir. No tenia idea de a que hora el espectáculo comenzaría, pero si estaba seguro de algo era que quería verlo de principio a fin.

Al momento en que se colocaban frente al parque y una gran ola de lo que le parecía era temor en el ambiente se apoderaban de la ciudad el Noah se encontraba de pie tranquilamente admirando la primera estrella de la noche –que te parece?, dicen que si le pides un deseo a la primera estrella y aplaudes 3 veces ese deseo se cumplirá – dijo el científico a su akuma acompañante, quien lo miro con un rostro de extrañeza

De veras cree en la suerte? – Pregunto finalmente el akuma al Noah en un tono un poco risueño – por supuesto, ¿como cuestionar una leyenda que lleva siglos? – dijo al momento que daba 3 palmadas y pedía el deseo que anhelaba.

y… que fue lo que deseo? – pregunto nuevamente el akuma aunque no esperaba realmente una respuesta. El Noah al escuchar la pregunta se echo a reír de forma increíblemente llamativa – de echo… - pauso por un segundo mientras miraba al piso y una sonrisa un tanto macabra, aunque descotaba alguna especie de fetichismo invadía su rostro – deseo que una interesante pareja este aquí pronto…

Al ver la inocencia de mi compañero me quede realmente asombrada e impactada, nunca antes había visto algo parecido a eso y menos en la forma en que Crimson lo había usado era algo realmente sorprendente a mi punto de vista -Wow… dije entre pensamientos mientras veía con mis ojos el movimiento de Crimson. Al finalizar con el movimiento los akumas nivel 1 que se encontraban afuera fueron destruidos fácilmente y Crimson quedó sin ningun rasguño o al menos eso se veía a simple vista -De acuerdo Crimson. Esto es realmente emocionante!- fue lo que dije antes de entrar a la estación con una gran sonrisa en mi rostro y con un paso un tanto divertido.

Al entrar a la estación se veía partes destruidas de la estructura, la oscuridad predominaba ya que las luces fueron destruidas por las balas de akumas, algunas personas aun se encontraba en la estacion pero estas mostraban en sus rostros una expresión de miedo y angustia. Mientras caminaba entre las ruinas de la estación podía sentir la sensación de miedo y sangre en el aire, en algunas partes de la estación se observaba ropa de personas y manchas de sangre, era realmente aterrador pero no podía demostrar esa sensación ni siquiera sentirla porque si lo hacía era mas vulnerable a cualquier ataque de los enemigos que se encontraban esparcidos por el lugar pero que por las sombras no se podían apreciar.

Solté un suspiro y tomando una roca que estaba en el suelo la aventé para verificar si existia una reflexión de sonido en otras palabras “eco”. Al lanzarla y al chocar con el suelo pude verificar que afirmativamente existia esa propiedad del sonido en aquel lugar -Bien, es turno de Note Dio- dije mientras me estiraba levemente y tomaba mi estuche de violín, lo acerque a mi pecho, solté un suspiro para finalmente cerrar mis ojos y sonreir levemente -Tocas conmigo Note Dio?- mi violín dentro del estuche empezó a brillar intensamente haciendo que el estuche se abriera por la fuerza que emanaba la inocencia, al abrirse el estuche se pudo observar un violín cuyo color era negro y sus cuerdas eran de un color carmesí brillante.

Di unos pasos hacia delante, acomodé el violín donde correspondía y tomando el arco de dicho violin solté un suspiro para finalmente decir -Sinfonia de la tristezza- pronuncie con un acento un tanto italiano y empecé a tocar algunas notas graves, gracias a la reflexión del sonido la melodía se empezó a escuchar por toda la estación recorriendo cada pasillo y cada aula de esta. Al finalizar baje a Note Dio de su posición y empecé a caminar de forma mas calmada y con un rostro de alivio -Crimson al parecer terminamos aquí, solamente tocare la ultima sinfonía- le dije a mi compañero mientras dábamos una vuelta en un pasillo y se observaban 4 akumas encerrados en esferas de color verde, me quedé un poco pensativa ya que según yo había escuchado mas balas pero no le di demasiada importancia ya que si se encontraba en la estación debería estar atrapado por un esfera. Volví a colocar a Note Dio como antes y tomando el arco volvi a tocar pero una melodía muy diferente - sinfonia di felicità – las notas eran mas agudas que la anterior, al estar tocando se empezaron a formar agujas en toda el area donde nos encontrabamos y en un movimiento de ojos señale a los akumas y estas rapidamente se dirigieron a los akumas encerrados -Je, pensabas escapar verdad?- dije mientras miraba arriba y un akuma que estaba encima de nosotros explotaba por las agujas que se lanzaron al momento que lo mire.

Termine la melodía y al acabar me estire un poco y desactivando a Note Dio lo volví a guardar en su estuche, al abrir el estuche el Golem de la orden empezo a revolotear -Naomi-san, la noche se acerca y los fenómenos del parque central estan a punto de dar comienzo por favor diríjanse lo mas rápido posible- el Golem dejo de revolotear y tomandolo en mis manos lo volví a guardar en su respectivo lugar -Crimson, Ben tiene razón debemos apresurarnos- le dije a mi compañero mientras lo miraba a los ojos y acomodaba mi estuche correctamente del lado derecho.

Tras esperar unos segundos la joven mostró una sonrisa y se decidió a entrar a la estación conmigo así que ambos entramos en esta, sin duda tenia un aspecto bastante horrible y olía a muerte, caminaba junto a la joven mientras observaba todos los rincones del lugar esperando el momento que apareciesen los Akuma que quedaban por el lugar, si es que quedaban, por el lugar lo único que podía verse era una gran oscuridad y ropas sin propietario además de sangre lo que significaba que los Akuma ya habían terminado con todas las personas que había en la estación lo cual hizo que mi rostro se tornase algo enfadado, la joven Naomi tomo una roca del suelo y la lanzo, gracias a este acto se pudo escuchar que había eco en la estación lo que quería decir que estaba casi vacía, la joven dijo que esta vez era el turno de Note Dio, su inocencia, así que me pare para esperar que la joven hiciese lo que quería hacer, tomo el violín de su estuche y este era de color negro cuando de pronto las cuerdas comenzaron a brillar con un tono carmesí lo cual me impresiono. -Carmesí...- fue lo único que dije mientras observaba a la joven utilizar su inocencia, una vez la joven hubo terminado con aquello me dijo que habíamos terminado en aquel lugar al tiempo que doblábamos la esquina y más adelante se encontraban 4 akumas encerrados en esferas, aquello debió ser gracias a la inocencia de la joven lo cual hizo que me impresionase algo más aunque mi rostro seguía siendo el mismo de siempre. La joven tomo de nuevo a Note Dio y después de decir el nombre de su nueva técnica comenzaron a crearse agujas y estas se lanzaban contra los 4 akumas, en un momento aquellos akuma fueron destruidos y mire arriba al sentir a otro akuma pero cuando mire este ya se encontraba explotando también, sin duda Naomi era muy poderosa pero aun así no iba a dejar de protegerla por ese echo, era mi compañera después de todo.

-Naomi-san, la noche se acerca y los fenómenos del parque central están a punto de dar comienzo por favor diríjanse lo mas rápido posible- Dijo un Golem que apareció del estuche que tenia la joven, eso me hizo pensar en que esto quizá no era más que una distracción pues ya se estaba haciendo tarde, la joven dijo que debíamos apresurarnos y me miro esperando una respuesta a lo cual afirme con la cabeza y la tome de la mano para comenzar a caminar para salir de allí y posteriormente correr hacia el parque. - Siento haber sido tan brusco pero si queremos llegar a tiempo sera mejor darse prisa ¿no crees? Sabiendo que hay Akuma no podemos estar parados pues acabarían con la ciudad.

Luego de un pequeño tiempo de espera entre la palabra y el deseo que había pedido se comenzó a ver el manto estrellado en el cielo que hacia alusión a una incontable cantidad de leyendas dibujadas entre si. El Noah había comenzado a caminar adentrándose al parque central, en el cual las plantas de alguna u otra manera parecían estar cobrando vida y mas aun mutaban de manera en que incluso la mas delicada flor adoptaba la apariencia de algo maligno y despiadado

Y se supone que con esto protegen las vidas humanas? – dijo el rubio de manera sarcástica al momento en que se paraba cerca de una planta que parecía tener un movimiento bastante especial, puesto que esta se movía con irregularidad a diferentes lados tal y como si se tratase de un girasol buscando la luz. – parece que todas las plantas sin excepción son afectadas – replico justo antes de que la luna estuviera en su punto máximo, se escuchaban las 12 campanadas de la iglesia y todas las plantas que poseían una extraña irregularidad se elevaban a lo mas alto que poseían y buscaban todo aquello que pudieran devorar. Por supuesto el Noah estaba en su lista, pero como no había producido movimiento alguno desde que estas se habían elevado no se preocupo por mas que observas hasta que alguna de ellas decidiera atacarlo